José Corbacho ha realizado hoy en la sala Barts el show Corbacho 3G.
Sumado al habitual y efectivo humor del comediante catalán, la tecnología
actual se ha convertido en absoluta protagonista del espectáculo. Si bien ha
sido abordada la temática por su lado más jocoso, resulta cuanto menos
inquietante la demostración del uso que se está dando a este poderoso
instrumento. Quizás la existencia de ciertas aplicaciones queda relevada a segundo
plano y en mera anécdota en comparación a la actitud y conducta del usuario, y
la supremacía de interactuar.
Precisamente en ese aspecto,
decir que la actuación ha sido interactiva es quedarse corto; de hecho, se nos
ha invitado durante un tiempo limitado controlado por una cuenta atrás, a hacer
algo teóricamente inaudito en el teatro: hacer fotos. También han advertido que
por favor no desconectáramos los móviles, matizando que no se trataba de ironía
o cinismo, dado que han propuesto usar las redes sociales para compartir en
vivo lo que estaba sucediendo; el fin no ha sido solo conectar con el
espectáculo, sino que en marco del propio show se pudiera usar y manipular al
público para convertirnos en protagonistas.
También ha habido tiempo para las
anécdotas personales, que al fin y al cabo las experiencias siempre son lo que
más llaman la atención. El humorista ha comentado una vez que tropezó en un spa
y acabó en el suelo; se hizo daño y no se podía levantar, momento de debilidad
que aprovechó un espontáneo que pasaba por allí para hacerse una foto con él
tirado en el suelo: no ha tenido desperdicio cuando ha enseñado la instantánea
en la pantalla del escenario. Precisamente, ahondando en el hecho de lo fácil
que resulta ahora hacerse fotos, la costumbre adquirida hizo que en una ocasión
confundiera una petición de hacerse foto con él con que él la hiciera. “La cara
de sorpresa de la pareja cuando posé con ellos fue un poema”. Sin embargo en
otro caso, la inercia hizo que se hicieran foto con él, luego le preguntaron quien
era.
Hablando de ello, al salir Corbacho e ir a hacerme foto con él, me
ha preguntado si quería que apareciera también mi novia. Al contestarle que
mejor por separado por si dejamos de estar juntos no tener que retocar la foto,
comentario que suelo hacer para romper el hielo, nos hemos empezado a reír cuando
me ha contestado con su tono habitual “¡Qué bueno, nunca me lo habían dicho!”. Pocas
fotos han sido tan naturales como esta.
Cuando hemos salido de la sala me
he encontrado a Pep Sala, que
justamente había hecho acto de aparición en el musical Boig per tu para interpretar en directo una canción. Hace poco que
le han operado, coincidiendo con el hecho de que no había estado nunca durante
tanto tiempo sin sacar nuevo disco. Precisamente me ha sugerido que lo siga a
través de una red social.
iZombie.
