domingo, 23 de marzo de 2014

El crèdit


Hoy ha tenido lugar la función de la obra El crèdit en el teatro La Villarroel de Barcelona. Jordi Boixaderas y Jordi Bosch encarnan respectivamente, a un solicitante de un crédito en una sucursal bancaria y al director de esta. El escenario, que se compone básicamente de una mesa de oficina con dos sillas, está situado en medio de la sala y rodeado completamente por las butacas, y su base consiste en una plataforma que gira lentamente durante toda la representación.


De este modo, la movilidad de 360 grados permite acercar a más público al escenario proporcionando a todos la misma visibilidad; no solo eso, sino que la obra es tan cercana que no requiere amplificación de sonido, y las voces que se oyen provienen directamente de los actores. Lejos de presentarlo como una tragedia, a pesar de los tiempos que corren, se trata más bien de una crítica constante llena de humor satírico, no tan solo del sistema financiero, sino también de las relaciones personales.


Puede asemejarse una situación cotidiana y habitual la que se expone, pero no se convierte precisamente en una guía de ejemplo de los pasos a seguir para solicitar un crédito, a pesar de parecer cumplir dichos requisitos en el primer periodo de tiempo de la obra. No obstante, con el transcurso de esta, la negociación se torna en discusión ganando terreno en lo sentimental, y el propio empleado de banca se ve involucrado personalmente. Como si de un catalizador desencadenante se tratara, la necesidad del solicitante afecta irremediablemente a la vida familiar del director, en una evolución argumental totalmente inesperada.


El actor catalán Jordi Boixaderas combina su carrera con la de doblaje, siendo su voz reconocida como la del actor que a día de hoy más veces ha doblado: Russell Crowe. También es voz habitual de Sean Bean, y de muchos otros conocidos actores tales como, por ejemplo, Daniel Craig en su personaje de James Bond o Gerard Butler como Leónidas en 300. Toda una voz.


Trabajé en un banco y allí perdí toda la vergüenza.