Frank Miller no necesita presentación en el mundo del cómic. Es el
dibujante y guionista de El regreso del
caballero oscuro, obra maestra que presenta a un retirado Bruce Wayne de avanzada edad, que vuelve
a coger el manto del murciélago para hacer frente al crimen de la futura y decadente
ciudad de Gotham. Supuso un antes y
un después, debiendo directamente a su trabajo los honores de los que goza el
caballero oscuro actualmente. En su cruzada se enfrenta a Superman, en marco de una escenografía, trama y estética que denota
su clara inspiración a la recientemente estrenada Batman v Superman: el amanecer de la justicia de Zack Snyder. Alan Moore asesinó a los superhéroes con Watchmen y Frank Miller los
resucitó con El regreso del caballero
oscuro. Su posterior trabajo como guionista con David Mazzucchelli a los lápices, estableció el origen definitivo
de Batman con un tono de serie
detectivesca negra realmente característico, que también influyó en el
murciélago de Christian Bale con Batman begins de Cristopher Nolan.
No obstante, sus inicios residen
en Marvel con un crossover de Spider-man y Daredevil, siendo Ronin
su primer trabajo con DC cómics, aunando
tradición americana, europea y japonesa. Volvió a Daredevil como guionista, y su obra Born again significó su primer trabajo con Mazzucchelli como dibujante; reinventó el personaje con el uso de iconografía
católica, realizando la etapa más memorable, recordada y leída, salvando por
encargo explícito un cómic que estaba sentenciado. Con el dibujante Bill Sienkiewicz guionizó cómics de Daredevil y Elektra, estableciendo en el caso de la asesina, el trágico pasado
inspirado en la mitología que la bautiza. Su obra más conocida con dicho
personaje fue Elektra lives again, rompiendo
los esquemas establecidos y realizando un giro en estilo, otorgando una
narrativa raramente vista con una lección magistral del uso del color en la
novela gráfica. Para Daredevil
escribió Man without fear, cómic que
fue concebido inicialmente como guión cinematográfico.
En Dark horse cómics desató la polémica debido a su estilo y
posteriormente en la misma editorial trabajó con Dave Gibbons, dibujante de Watchmen,
con la serie limitada Martha Washington
donde Frank sacaba a relucir de nuevo
su sátira política. También participó con su guión en la miniserie Robocop versus Terminator, así como en
el videojuego adaptado a plataformas como Mega
drive y Master system; otro
crossover en el que estuvo implicado fue el de Batman y Spawn, personaje
de Image cómics.
Fundó el sello Legend junto a otros reconocidos autores
para crear sus propios personajes y poseer los derechos como creador, con total
libertad y sin ninguna imposición; la revolución no se hizo esperar. Sin city, pura novela negra en cómic,
innovó en el medio con su estética y atmósfera; ideada como un único número,
conllevó a una serie, conformando para Frank
Miller su obra por excelencia de serie detectivesca negra. Cuando parecía
que era imposible superarse a sí mismo, sale a la luz el cómic 300, característico por su magnífico color
y su edición apaisada. La batalla de las Termópilas, narrada magistralmente,
sentó cátedra y desenlazó en una secuela: Xerxes.
Parecía que las hazañas de Frank no cesaban, a John Romita Jr. le regaló el mejor guión sobre el que trabajó, del
cual obtuvo su obra cumbre como dibujante, e incluso como amigo de su desde
siempre admirado autor de cómic Jack
Kirby, pronunció unas palabras en su funeral. Como dibujante y guionista,
trabajó nuevamente con Batman en la
secuela de El regreso del caballero
oscuro, bajo el nombre El caballero
oscuro contraataca, y junto al dibujante Jim Lee, realizó el guión de All
star: Batman y Robin. A día de hoy, ya están disponibles los dos primeros
números de la serie de cómics que conformará la tercera entrega de Miller de su obra maestra, cerrando así
la trilogía de El regreso del caballero
oscuro.
No solo ha estado involucrado en
el mundo del cómic, en el séptimo arte fue el encargado del guión de Robocop 2; de hecho Paul Verhoeven, director de la primera entrega, admitió las
influencias de Miller. Sin embargo,
su escrito fue sometido a la censura y a diversas modificaciones, que
conllevaron a que el texto fuera dividido en dos entregas, en las cuales figura
como guionista; no obstante, sus conceptos originales para la película acabaron
plasmados en cómics de nueva creación. Frank
aparece en la segunda parte realizando un cameo, como químico que trabaja en la
elaboración del narcótico Nuke, a las
órdenes de Caín, aunque
lamentablemente fallece en una explosión al entrar en escena Robocop.
En 2005 dirige junto a Robert Rodríguez y en colaboración con Quentin Tarantino la película que adapta
a la gran pantalla su obra Sin city, postura
lógica pero que se produce menos de lo conveniente en el mundo del cine. La
escenografía visual, que se acerca más que nunca a las viñetas en movimiento, y
la fidelidad a su propio estilo la convierte en una película de culto. El
propio Frank realiza un cameo, apareciendo
como sacerdote que es asesinado a manos de Marv
después de proporcionarle el nombre del senador Roark. También dirigió la secuela, Sin city: a dame to kill for, en la que aparece de nuevo junto a Marv en Kadie’s club. Ha sido productor ejecutivo de 300, fidedigna adaptación dirigida por Zack Snyder y trasladada a la gran pantalla prácticamente viñeta a
viñeta y palabra por palabra, y su secuela 300:
el origen de un imperio. Frank Miller,
creador de Sin city y 300, también ha dirigido con su
característica visión The spirit,
película del personaje de Will Eisner.
Después de lo expuesto, y
teniendo en cuenta que solo se podía acceder a su firma mediante sorteo previo,
sobran las palabras al decir que he sido de los pocos afortunados que han podido
obtenerla. He querido que la dedicatoria fuera en la edición del trigésimo
aniversario de El regreso del caballero
oscuro: al acercarme me ha preguntado cómo estaba, a lo que he respondido
que bien y seguidamente he pasado a darle las gracias y decirle que era el mejor.
Mientras me estaba firmando le he comentado que Batman es lo que es ahora mismo gracias a él, comentario que me ha
agradecido sonriendo, y a pesar de que la editorial nos ha comunicado que no le
diéramos la mano, ha sido él quien me la ha tendido para despedirse.
Alan Moore asesinó a los
superhéroes, Frank Miller los
resucitó.